Una boda es para cualquier pareja un día muy especial y como tal, se busca también que amigos y familiares la recuerden como una jornada bella y divertida. Así, es tradición y símbolo de agradecimiento, entregar un pequeño presente a todos los invitados.En esta tarea; es decir, en la elección del regalo, juegan un papel muy importante los padrinos. La madrina ayuda a la novia en todos los detalles, entre ellos, la asiste en la elección y compra de los recuerdos de boda, y suele correr con los gastos de los detalles.Las tiendas especializadas en los detalles de bodas ofrecen cada vez más recuerdos para las damas que pueden resultar útiles además de ser un bonito presente. Hoy en día se puede regalar casi cualquier cosa; desde abanicos, un juego de velas, hasta un monedero, un espejo de bolso o un pequeño perfume.Para los caballeros la cosa cambia y la variedad de regalos es más limitada. En este caso se trata más de una cuestión de imaginación. Y es que hasta no hace mucho tiempo el tradicional puro era el regalo estrella para ellos. Pero los detalles cambian con los tiempos. Los puros tienen a desaparecen y los hombres también quieren un regalo. Así, las tiendas especializadas ofrecen desde puntos de luz para leer en la cama, mecheros grabados, hasta relojes o licores.