Tapadas durante el frío, ahora se desnudan y ponen al descubierto problemas que compartimos la gran mayoría de las mujeres. Uno de los más complejos es el de las arañas vasculares.Arañas vascularesLos embarazos, el sedentarismo, las hormonas o la herencia genética son los responsables de esas ramificaciones venosas tan antiestéticas, que salpican especialmente nuestros muslos y que tanto nos molestan. Las denominadas arañas vasculares no son otra cosa que una insuficiencia venosa crónica, debida al aumento de la presión de la sangre, que se manifiesta exteriormente con la rotura de algunos vasos capilares. Pero no desesperes: este problema circulatorio, que afecta a casi el 30% de las mujeres y al 15% de los hombres, tiene solución.TratamientoEn función del grosor de las venas, hay procedimientos distintos para eliminarlas.Esclerosis química: Consiste en infiltrar una solución química en el vaso afectado para quemarlo. Una lámpara de transiluminación facilita la visión de la vena, evita que el producto esclerosante se salga y asegura su recorrido por la zona. Luego la circulación se desvía hacia un vaso sano. Muy útil para vasos de menos de tres milímetros de grosor.Crioesclerosis: En este sistema se usa una jeringuilla con un doble compartimento; en uno lleva la solución esclerosante y en el otro, un producto que lo mantiene a muy baja temperatura. Está recomendada para vasos de más de tres milímetros.Láser: Se emplea el equipo VBEAM Candela, indicado para cerrar varicosidades superficiales inferiores a un milímetro, tan finas que no se pueden inyectar. Es muy efectivo porque, incluso debajo de las arañas vasculares, puede haber varices reticulares no visibles. Por fototermolisis selectiva, provoca una pequeña quemadura de las venas dilatadas.