Tras la retirada en España y en Italia, D&G ha decidido retirar su última campaña en todo el mundo “por su repercusión en los intereses de grupos de interés humano e individuos”.
Según los diseñadores, “tanto desde el punto de vista personal como desde el comercial, intentábamos recrear un juego de seducción en la campaña y realzar la belleza de nuestras colecciones: nunca fue nuestra intención causar controversia, ofender a nadie o promover la violencia contra la mujer en ningún caso”.
Esta nueva polémica se produce un mes después de que la firma Dolce&Gabbana despertara críticas por una campaña en la que los modelos aparecían con cuchillos en las manos.
La retirada del nuevo anuncio de la firma fue solicitada por la Federación de Consumidores en Acción (FACUA), los Verdes y unos veinte ciudadanos a título particular, mientras que el Instituto de la Mujer también inició los trámites para unirse a la petición.
Según los denunciantes, esta campaña publicitaria, en la que se observa a un hombre sujetando por las muñecas a una mujer tendida en el suelo, va contra la Ley General de Publicidad que prohíbe todo anuncio “que atente contra la dignidad de la persona”, incluidos los que “presenten a las mujeres de forma vejatoria”.