Para mucha gente, hacer ejercicio y cuidarse es más un castigo que un premio, pues se aburren fácilmente, se hartan, se cansan y el ejercicio les parece todo menos divertido. Si eres una de estas personas, te contamos que existen muchas maneras de hacer esto más llevadero para que incluso lo llegues a disfrutar, y por eso te compartimos estos tips:
Inspírate y no te estreses. Seguro tú también has visto esas imágenes de cuerpos espectaculares colgados en las paredes de los gimnasios. Aunque suelen ser buena motivación aspiracional, no te obsesiones, pues está demostrado que las mujeres que vieron mucho tiempo esos pósters mientras se ejercitaban resultaron más estresadas al terminar. La clave está en no obsesionarte, está bien que las uses para echarle ganas, pero no te frustres si no te ves así, recuerda que ellas también han pasado por el Photoshop, y aunque no fuera así, las comparaciones no son buenas.
Apóyate en tus amigos. Ya sea que te inscribas a alguna clase o hagas una rutina de ejercicio en casa invita a un amigo, será más divertido, podrán motivarse mutuamente y hasta burlarse uno de la otro, lo cual hará el ejercicio mucho más divertido y llevadero.
Arma un playlist con tu música favorita. En esta época que podemos cargar con toda la música que disfrutamos en la comodidad de algo tan pequeño como nuestro teléfono celular, debemos aprovechar esa practicidad para adaptarla a nuestras actividades, sobre todo al ejercicio, pues aunque estemos realizando el mismo esfuerzo y nos cansemos igual, la música nos motiva al hacer que nuestro cerebro se enfoque en los sonidos que disfruta.
Enfócate en beneficios reales
Si al terminar tu rutina no terminas con la figura de una Kardashian y eso te frustra, estás haciendo las cosas mal. Enfócate en los beneficios tangibles e inmediatos de la sesión, por ejemplo en que terminando tu rutina tendrás más energía, o que estarás quemando algunas calorías, cosa que a largo plazo te llevará a ver resultados más tangibles.