¿Cómo lidiar con la pérdida?
Hay que comprender que la pérdida no es tal hasta que le damos ese valor. Saber que en toda muerte hay un nacer y que en toda pérdida hay una ganancia, te ayudará a entender que, por más que tendamos a culpar a un objeto, persona o circunstancia, la pérdida es un complemento de la creación y de nuestro propio crecimiento.
Debes entender que sentir es importante y que dejar ir no significa dejar de sentir, pero no debes dejarte hundir por tus emociones y para eso, debes aprender a lidiar con la pérdida de esta manera:
- No la percibas desde la victimización, en su lugar, observa atenta las condiciones de tu
mente (pensar y sentir) que te vinculan a la idea de que ‘tal pérdida’ es mala. - Expresa tus emociones y permítete sentir el dolor, enojo, tristeza o cualquier otra sensación; son emociones naturales, sólo date cuenta que permanecer viviendo con ellas no lo es.
- Con el fin de sanar tus pérdidas con benevolencia y afecto, intenta encontrar todo lo positivo que siempre acompaña a lo negativo.
- Practica el soltar y dejar ir con la máxima madurez posible. Pasa de un infantilismo
emocional a la conciencia de responsabilizarte y así entenderás que la pérdida
es parte del proceso natural de la vida.
Ten en mente el darte la oportunidad de transformar tu manera de pensar y sentir, de innovar la forma en que ves y te relacionas en la vida con nuevas ideas que te permitan entrar en un sistema de percepción más amplio y ligero. Deja de calificar las situaciones como buenas o malas y en lugar de ello percibe los eventos de ‘obtener’ y ‘perder’ como parte del flujo de la existencia, pues aunque parezca pérdida, es crecimiento.
Y recuerda que a veces se gana perdiendo.