La salud bucodental es vital para gozar de una boca con un aspecto envidiable y, más importante aún, para evitar enfermedades que pueden alcanzar cotas muy preocupantes, como el cáncer oral. Ésta es una patología que afecta especialmente a fumadores que consumen alcohol, aunque también a sólo los que fuman, a los que beben y a los que mantienen una nula o escasa higiene bucal. No obstante, un 25% de los afectados por el cáncer oral son personas que se encuentran fuera de ese perfil de riesgo.Prevenir y revisar son los dos factores clave para evitar contraer esta patología, por eso los expertos recomiendan no fumar, no tomar bebidas alcohólicas y rehuir de las infecciones bucales del papilomavirus, que se transmite por vía sexual. Asimismo, se aconseja consumir una dieta equilibrada con abundancia de verduras y frutas frescas, cepillarse los dientes y realizar un chequeo de nuestra propia boca, tanto en nuestro hogar como acudiendo al dentista.Si descubres lesiones como el sangrado de las encías, una herida que tarda más de dos semanas en curar (aunque no duela), un bultito en el cuello que no se mueva y te moleste o los labios dormidos o con hormigueo, conseguirás que la tasa de supervivencia crezca de forma espectacular. Así, con un diagnóstico precoz se aumenta la supervivencia y se disminuye las secuelas, ya que el tratamiento de los cánceres orales avanzados pueden tener graves consecuencias físicas porque la cirugía afecta a la capacidad de hablar, masticar o respirar.