La pérdida de un ser querido requiere de un proceso de duelo que ayude al afectado a superarlo, sin que derive en ansiedad, depresión o incluso problemas físicos. Así opina la psicóloga Dulce Camacho, directora del Centro de Atención al Duelo ALAIA, que ha atendido en sus instalaciones a más de 1.500 personas para ayudarles a vivir su duelo.Para vivir el duelo de forma adecuada debe haber "momentos en los que será bueno salir a la calle, pensar en otras cosas". Sin embargo, no es sano estar siempre buscando distracciones o incorporarse de inmediato al trabajo, a veces conviene "estar conectado con el dolor", señala Dulce.Según la terapeuta, "lo que más ayuda a superar una pérdida es la terapia grupal, pues compartir sentimientos con personas en tu misma situación, que escuchan sin juzgar y que no apremian al afectado para animarse es muy positivo", explica.Cuando se pierde a una pareja, hermano o padres, la recuperación con ayuda para superar el duelo es "bastante positiva" y puede conseguirse en un periodo de dos años. Sin embargo, cuando se pierde un hijo "es más complicado", señala Camacho.