Se sigue adelantando la edad de inicio de las relaciones sexuales, que ahora se prueban antes de cumplir los 16 años. Una encuesta realizada sobre más de 2.000 jóvenes españoles revela que casi el 80 por ciento de los adolescentes de esa edad asegura haber mantenido alguna relación sexual aunque poco más de la mitad de los más jóvenes dice haber llegado a la penetración.
Subiendo en el tramo de edad, el 90 por ciento de los que tienen entre 20 y 24 años dice haber mantenido relaciones coitales. En este contexto llama la atención que un tercio de los jóvenes confiese que a veces no utilice el preservativo, fundamentalmente por la euforia del momento.
Atendiendo al tramo más joven de la muestra, el que oscila entre los 15 y los 19 años, se puede observar que la mayoría se ha iniciado ya en la sexualidad, siendo mayor el número de chicos. Un 87,1% de éstos afirma que ha mantenido relaciones sexuales alguna vez, mientras que la cifra en el caso de las chicas se reduce hasta el 75,4%.
Sin embargo, esta cifra disminuye en cuanto a los que han completado las relaciones con penetración, ya que en ese caso aproximadamente la mitad de los encuestados confiesa haberlo hecho, un 55,8% en el caso de los chicos y un 52,8 en el caso de las chicas.
En este sentido, la ginecóloga y directora del Programa de Atención a la Mujer en el Maresme del Instituto Catalán de la Salud (ICS), Carmen Coll, señaló, en la presentación del estudio en Barcelona, que pone de relieve que un 90 % de los jóvenes de nuestro país se declaran sexualmente activos y se inician en el sexo a una edad cada vez más temprana y que, asimismo, cada vez se rebaja más la edad de inicio de las relaciones sexuales completas.
Los chicos se dan más prisa
Y si parece que los chicos se dan más prisa que las chicas en iniciarse en estas materias, también da la impresión de que les cuesta más a ellos practicar relaciones coitales según avanzan los años. Y es que atendiendo a la franja comprendida entre los 20 y los 24 años, son las chicas las que en mayor número han practicado relaciones sexuales con penetración, aunque con escasa diferencia -un 91,8% en el caso de las chicas y un 91,5% en el caso de los chicos-.
Esa mayor premura en el caso de los chicos para comenzar en las relaciones sexuales tiene, también, su reflejo esta franja de edad, cuya edad media de inicio se sitúa en los 16,8 años en el caso de ellos, y en los 17,3 en el caso de ellas.
En cuanto a la frecuencia de relaciones, los chicos lo tienen más complicado que las chicas -de entre 20 y 24 años- para encontrar parejas sexuales ya que ellos afirman mantener una media de 8,4 relaciones al mes frente a las 9,1 veces que ellas afirman mantener relaciones coitales mensuales. Esta frecuencia se reduce conforme se va reduciendo la edad, que entre los más jóvenes está entre 7 y 8 veces al mes. Puede que esta frecuencia, mayor entre los de más edad, tenga relación con la estabilidad de la pareja, es decir, a mayor estabilidad, mayor número de relaciones sexuales ya que esta condición aumenta, también, conforme aumenta la edad.
Así, los jóvenes de entre 20 y 24 años son más estables, ya que la mayor parte de ellos afirma que su pareja sexual es la misma desde hace al menos seis meses. Pero además no sólo mayor edad es rasgo de mayor estabilidad, sino que el género parece, también, determinante. En este caso, un 75,7% de las chicas afirma mantener relaciones sexuales con una pareja con la que lleva más de medio año, frente a los chicos, que en un 51,2% de los casos sostienen tener la misma pareja sexual desde hace seis meses.
En cambio, en edades más jóvenes la temporalidad de la pareja sexual es más variable en el caso de los chicos, ya que el 31,2% de ellos indica tener la misma pareja sexual durante un mes y, por debajo, un 30,6% durante más de seis meses.
Un tercio, no usa preservativo a veces
El estudio, desde el punto de vista de la prevención sexual, revela más irresponsabilidad que ignorancia por parte de los jóvenes, ya que un tercio de ellos admite que no utiliza el preservativo en todas sus relaciones sexuales a pesar de que del informe se desprende que “los jóvenes españoles conocen y utilizan métodos anticonceptivos eficaces”. El motivo de este hecho se asocia con el “imprevisto de las relaciones” o a la “euforia del momento tras salir de una discoteca o consumir alcohol”.
El método anticonceptivo más popular entre los jóvenes es el anticonceptivo, seguido de la píldora, el coito interrumpido, otros métodos y el llamado “doble método” que consiste en que “tanto el chico como la chica toman medidas”. Coll, en este sentido, especificó que en países como Holanda es “muy común que el chico se ponga preservativo y la chica tome pastillas”, lo que reduce “muchísimo” el riesgo de embarazo no deseado.
Según Coll, la falta de consideración de riesgo a la hora de tomar medidas anticonceptivas entre los jóvenes españoles hace que hasta un 14,8% de las jóvenes españoles puedan quedarse embarazada. Este riesgo se traslada al número real de embarazos no deseados, ya que la ginecóloga manifestó que la encuesta “constata una evolución creciente del número de embarazos no deseados y de abortos”, cuya cifra “es la más alta en chicas más mayores”, con respecto a hace tres años.
Esta cifra es más alta en Cataluña, aunque Coll no pudo facilitar más datos por Comunidades Autónomas, ya que “requerirían un mayor número de entrevistas”. En esta línea no descartó que el número de embarazos no deseados también esté causado por la mayor presencia de mujeres inmigrantes.