Hubo quien impactó, quien adormeció y quien horrorizó en la gala anual del Met para celebrar a los maestros de la moda. Si te perdiste este evento, aquí te dejamos todos los detalles.
Sarah Jessica Parker, Karolina Kurkova y Sarah Silverman se apuntaron un 10 con sus increíbles vestidos de princesa, pero hubo personas que dejaron mucho qué desear con sus elecciones de atuendo.
Erykah Badu llevó el sombrero de Pharrell a un nuevo nivel con más brillo, Maggie Gyllenhaal usó lunares aunque al estilo Valentino y Lupita Nyong’o se arriesgó con un “polarizador Prada”, como mencionó algún crítico, vestida en verde perico al estilo años 20 con una capa de pedrería con grandes plumas a los lados y un vestido marrón corto debajo.
Kristen Stewart no se quedó atrás sorprendiendo con un barroco vestido de Chanel que tenía una capa de tul con cuentas, plumas y la parte superior ligeramente holgada en tono metálico, con una especie de banda ceñida en la cintura.
El blanco y el negro se impusieron en la gala del lunes por la noche en el Museo Metropolitano de Arte en honor a la exposición del Instituto del Vestido sobre la obra del diseñador clásico Charles James.
Parker arregló su cabello en un moño alto para subir por las escaleras evocando el espíritu de James con un corsé negro, guantes blancos largos y una amplísima falda blanca de Oscar de la Renta. El diseñador incluyó su firma en rojo en la parte trasera del vestido.
Silverman lució una silueta clásica sin tirantes en guinda de Zac Posen y Kurkova un vestido azul marino con grandes estampados florales de Marchesa.
La dupla blanco y negro de James como el conjunto de pantalón y saco largo de Givenchy que llevó Badu estuvo acompañada por descargas de color como Olivia Munn, en un Diane von Furstenberg, Jourdan Dunn en un Topshop a la medida y un vestido floral de Carolina Herrera que llevó Emmy Rossum. Reese Witherspoon le puso rosado en un sencillo vestido sin tirantes de Stella McCartney.
Otras personalidades que dieron de qué hablar en la noche:
RIHANNA: su tatuaje debajo del pecho se salía de su blusa recortada con cuello alto, pedrería en el cuello y hombreras puntiagudas, que combinó con una falda drapeada que tenía un pliegue poco favorecedor en la parte trasera.
KATIE HOLMES: Su vestido amarillo mostaza de Marchesa parecía sacado directamente de “La Bella y la Bestia” y el peinado con el que lo acompañó no hacía nada para evitar esta comparación.
SHAILENE WOODLEY: Su atuendo parecía compuesto de varios: Gris metálico y marrón con mangas abombadas y aplicaciones florales sobre transparencias negras y un fondo marrón brillante al estilo Rodarte.
BEYONCE: La reina usó un vestido negro con un amplio escote y velo de cuentas acompañada por su esposo Jay Z quien optó por un esmoquin con saco blanco.
NEIL PATRICK HARRIS y DAVID BURTKA: Llevaron el frac al extremo. Las colas de sus levitas llegaban a los talones, igual que sus pantalones. Burtka lució un modelo en tonos gris, blanco, negro y gris claro con rombos y rayas, decir que era excesivo sale sobrando.
KIM KARDASHIAN: Nada de flores en esta ocasión. Usó un vestido de Lanvin con cinturón en azul obscuro y negro. El color le sentaba muy bien, pero quizá le sobraba tela.
KIRSTEN DUNST: Las diseñadoras de Rodarte quizá fueron las menos comprendidas de la noche. El dúo de hermanas atavió a Dunst con uno de sus vestidos inspirados en Star Wars con un estampado de la Estrella de la Muerte en las rodillas de su vestido negro y un hombro con tela retorcida y el otro con un tirante en tul negro.
BLAKE LIVELY: Optó por Gucci en rosa pálido para un estilo refinado que tenía un efecto de capa de los hombros al final de su cola. Se veía perfecta pero Ryan Reynolds no le quitaba las manos del “derrière” en la alfombra roja.
SOLANGE KNOWLES: Su vestido entre naranja y durazno era demasiado corto y poco favorecedor. El modelo de Phillip Lim parecía tener metros de tela de sobra y no lució bien sin su gran cabello.