¿Cansada de las arrugas? ¡No te preocupes más por eso! Aquí te diremos cómo hacer un tratamiento casero a base de cerveza para quitar las arrugas.
Necesitarás:
- Un limón
- Medio vaso de cerveza
- Medio vaso de agua de rosas
Procedimiento:
- Exprime el limón hasta convertirlo en zumo.
- Después mezcla el jugo con la cerveza y el agua de rosas.
- Aplica el tratamiento sobre el rostro con la ayuda de un disco de algodón, como si se tratara de un tónico.
Debido a que nos encontramos ante un remedio casero que no se debe aclarar con agua, lo mejor es que lo apliques sobre tu cutis justo antes de irte a dormir. De este modo, hará efecto durante toda la noche y a la mañana siguiente podrás presumir de una piel joven, tersa y sin arrugas.