Sin duda hay un paso que todas algunas vez hemos dudado en dar y ese es terminar una relación de años. ¿Por qué cuesta tanto? Primero por aquellos recuerdos, es inevitable no tenerlos después de convivir por tanto tiempo no solo con tu pareja, sino con su familia, sus amigos, etc.
Por lo que terminar un noviazgo o matrimonio no solo es terminar con la persona, sino con todos los que le rodean y con los que probablemente aprendiste a llevarte muy bien y hasta llegaste a querer, sin embargo, si tú ya no estás cómoda en la relación porque ya no amas a tu pareja o simplemente sus planes ya no coinciden debes terminar a la de YA esa relación.
Ahora la pregunta es ¿cómo hacerlo?
No es sencillo, pero puede ser menos complicado de lo que te imaginas. Primero deja las cosas claras. No pongas pretextos para decir que te vas. Si te enamoraste de alguien más, dilo. Si es porque tu ritmo de vida ya no te permite tener una relación, no te quedes con las ganas de hablarlo y por supuesto si simplemente estás en desacuerdo con la manera de ser de tu pareja, aclara que es por eso que ya no quieres continuar.
Al terminar una relación surge una infinidad de dudas de ambas partes, pero en ocasiones más de quien es el ‘cortado’ como la clásica de “¿qué hice mal?”.
Así que aclara las cosas antes de irte pero vete y no te detengas.