Terminar una relación siempre es difícil, tanto que en ocasiones consideramos volver con esa persona e intentarlo una vez más.
Sin embargo, eso pocas veces funciona; para todos aquellos que lo dudan, un estudio realizado por la Universidad de Wisconsin y la Universidad Estatal Bowling Green, lo ha confirmado.
En él, describen a las relaciones como uniones íntimas concebidas como trayectorias dinámicas que implican un conjunto homogéneo y multidireccional de transiciones.
Es decir, un conjunto de hechos en el cual ninguno de los miembros de la pareja sabe que sucederá.
Para entender por qué las personas intentan recuperar una relación analizaron el comportamiento de 792 jóvenes cuyas relaciones terminaron; cerca de la mitad de ellos había tratado de retomar una vieja relación amorosa.
Los investigadores encontraron que los jóvenes solteros eran quienes más optaban por regresar con sus ex parejas frente a aquellos que estuvieron casados y se divorciaron o se separaron.
La razón por a que concluyeron que que retomar una relación pasada es malo, es que quienes seguían en contacto con sus exparejas, sin importar el porqué se terminó la relación, tenían mayores problemas para seguir adelante con sus vidas y eliminar la dependencia emocional.
Además, muchos de los problemas causantes de la separación no se solucionan con mantenerse separados por un tiempo. Quienes retomaron sus relaciones mostraron mayor probabilidad de sufrir enfermedades ligadas a la salud emocional.
Sin embargo, las reconciliaciones tienen un aspecto positivo. Quienes experimentaron altibajos en sus relaciones también vivieron una especie de autorrevelación; se conocieron mejor a ellos mismos y entendieron por qué terminaron.
Cuando se trata de parejas jóvenes es más difícil que vuelvan a estar juntos, pues cuando lo hacen ambos han madurado o buscan otras cosas en una pareja.
Otra investigación, realizada en 2012, reveló que entre más amigable sea un rompimiento, menor es la probabilidad de que la pareja regrese; esto por que no existe el sentimiento de culpa de haberse herido.
De igual forma, señalaron que quienes terminaron definitivamente sus relaciones mostraron una mayor claridad en sus vidas que quienes volvieron con su ex.
En cuanto a las parejas que terminan y regresan en varias ocasiones, tienden a ser ambiguas sobre cuándo y por qué una relación terminó. No tienen claro su estatus romántico y las relaciones continúan de forma indefinida y con altibajos, porque ninguno de los dos está realmente comprometido.
Las parejas casadas tienden a permanecer en sus matrimonios aunque ya no exista amor, por los problemas legales que implica el divorcio y evitan el dolor de una separación, en especial si hay hijos.
Si embargo, en el amor no hay reglas, y cuando una pareja decide volver a intentarlo, lo importante es que ambos se comprometan y encuentren una solución a sus problemas.