Conseguir una piel perfecta después de la depilación es sumamente complicado por los granitos que dejan el rastrillo, la irritación que provoca la cera y la poca eficacia de algunas cremas depiladoras, y por supuesto los MOLESTOS VELLITOS ENTERRADITOS.
Pero tranquila que todo tiene solución, pues con estos 5 tips podrás lucir una piel de 10 sin ninguna imperfección.
- Utiliza crema humectante para rasurar. Aunque veas la espuma de afeitar de tu novio haciéndote ojitos, no la utilices, ¡por favor no lo hagas! Pues generalmente, la espuma de afeitar está hecha con químicos que pueden resecar tu piel y con ello provocar los molestos granitos rojos que inevitablemente traerá consigo los vellitos incrustados.
- Evita la ropa interior muy ajustada. Sí, los calzones grandes no son nada sexys, pero si recién te rasuraste lo mejor es que utilices lencería que no provoque tanta fricción en tu piel, pues ocasionará que los vellos se curven hacia la piel.
- Haz una pequeña exfoliación en el área del bikini. Toma un poco de azúcar y miel y frótalo en la zona, cuida que no roce con tus genitales. Da masajes en círculos y después enjuaga con agua tibia y provocara que los vellitos enterrados salgan.
- Utiliza material limpio para depilarte. Los vellos encarnados en ocasiones son causados por pequeñas infecciones producto de depilarte o rasurarte con utensilios poco higiénicos. Si vas a utilizar pinzas lávalas y sécalas antes de utilizar, si optas por el rastrillo, lávalo con agua tibia antes de usar.
Báñate antes de depilarte. El agua caliente provocará que tus poros se abran y los vellos salgan con más facilidad. Después de depilarte lava la zona nuevamente.
Humecta tu piel. La resequedad facilita la presencia de vellos enterrados, evita el uso de cremas con perfumes o lociones pues estas más que humectar la resecan y maltratan.