La pérdida de peso, el cuidado de nuestra piel y una mejor calidad de sueño son algunos de los motivos que nos animan a deshacernos de la pijama y empezar a dormir como Dios nos trajo al mundo. Dormir desnuda tiene muchos beneficios, pruébalos:
- Mejora la calidad del sueño. Cuando usas pijama, haces que tu cuerpo tenga que incrementar sus esfuerzos para mantener una temperatura más baja, provocando interrupciones y un sueño algo más incómodo. Según un estudio de la revista Brain, bajar la temperatura del organismo permite duplicar el periodo de sueño profundo durante una noche.
- Ayuda a perder peso. La temperatura de tu cuerpo desciende de forma natural durante el sueño y, a partir de ese momento, se tiende a quemar más calorías tratando de elevar dicha temperatura. Por el contrario, si te pones ropa para dormir, este esfuerzo decae y tus posibilidades de perder peso son más reducidas.
- Piel de ensueño. Una de las principales razones por las que deberías dormir desnuda es que permitirás que tu piel respire mejor, lo que te ayudará a combatir el acné, obtener un brillo natural y retrasar el envejecimiento.
- Evita infecciones. De acuerdo con la especialista Nancy Herta, de la Universidad de Michigan, decirle adiós a tus panties al dormir es bueno para tu vagina, ya que la dejas respirar mejor y mantienes nivelado su pH, lo que disminuye la posibilidad de adquirir infecciones por hongos y bacterias en esta zona.
- Mejora la relación con tu pareja. Según los científicos, cuando dos cuerpos desnudos se frotan, se libera la oxitocina, hormona del bienestar, lo cual aumenta la líbido y favorece las relaciones íntimas.
Quítate la ropa, aumenta tu sex appeal y aumenta la seguridad que tienes en ti misma y en las relaciones íntimas con los demás. Prueba las ventajas de dormir desnuda.