Los 8 errores que (probablemente) estás cometiendo a la hora del baño

No te encariñes demasiado con tu esponja, debe ser cambiada cada tres o cuatro meses

Existen hábitos que podrían estar poniendo en riesgo tu salud e, incluso, tu integridad física. Y aunque la ducha es un ritual diario, podrías estar cometiendo pequeños errores, detalles “insignificantes” que probablemente solo resten beneficios a tu apariencia.

¿Cada cuánto cambias tu esponja?
  1. El menos conocido: Shampoo antes del acondicionador. El secreto mejor guardado de las celebs. Lo ideal es aplicar el acondicionador incluso antes de entrar a la regadera. Lo dejas reposar por aproximadamente 5 minutos y después lo enjuagas con mucha agua. El shampoo va al final del proceso.
  2. El más común: Reutilizar la toalla de baño una y otra vez. Las bacterias prosperan en toallas mojadas por su tejido apretado. Cuando se les vuelve a utilizar, las bacterias pueden llegar a zonas del cuerpo como la espalda o partes íntimas lo que puede producir infección. ¿Lo ideal? Una toalla limpia por día y no compartirla (¡no! con nadie).
  3. Tropecé de nuevo y con la misma esponja. Por la humedad, su textura y su forma, son hogar de millones de bacterias. Te recomendamos comprar nuevas esponjas constantemente; de lo contrario, estarás esparciendo bacterias viejas por todo tu cuerpo.
  4. El que ya te imaginabas. La ABC News, reveló que el piso del baño en realidad albergaba la mayoría de las bacterias, alrededor de 2 millones por pulgada cuadrada, para ser exactos.
  5. El que cometes por pura flojera: Bañarte maquillada. Hay muchos productos de cosméticos a prueba de agua que no están hechos para limpiarse con agua y jabón. Esto significa que podrás dejar residuos en tu cara, provocando grasa o acné.
  6. Agua (muy) caliente. Desgraciadamente bañarnos con agua muy caliente debilita el pelo, afecta la circulación e incluso, promueve la depresión. Por eso te recomendamos bañarte con agua fría, así empezarás el día con más energía y un mejor humor.
  7. Rasurarte desde el principio. Sabemos que hay días en los que tienes muchísima prisa y no puedes esperar para hacerlo, pero aún así es un grave error.
  8. El que ni te imaginabas: Tener una cortina desproporcionada. Ojo con las medidas de la cortina. Tener una demasiado amplia, creará un auténtico criadero de hongos. Pequeños errores que hacer la diferencia.
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