Hace algunos años salió a la moda unas mascarillas de color negra o gris que eliminaba de un abrir y cerrar de ojos los puntos negros haciendo ver a tu piel sumamente hermosa y libre de toda imperfección. Sin embargo esto puede traer consecuencias a tu piel, no solo son las lágrimas que te pueden provocar, y no hablamos de la emoción que vas a sentir cuando veas desprender los puntos negros, si no que provocan un dolor a la hora de retirarla del rostro por su fórmula peel-off.
Estas mascarillas se adhieren a la piel, y pasados unos minutos se quitan arrancandolas de tu piel. Además de los productos hay youtubers que han realizado sus propias mascarillas caseras para puntos negros con ingredientes tan disparatados como el pegamento.
Ver en esa tira todo lo que hemos conseguido arrancar puede generar una sensación de limpieza más profunda pero nos hace preguntarnos, ¿qué efectos pueden tener para la salud de nuestra piel? ¿Es necesario? Estas son 4 preguntas que tienes que hacerte sobre tu mascarilla y el daño que te puede provocar.
¿Una mascarilla tiene que doler?
La respuesta, es no. Las mascarillas son preparados cosméticos pensados para ser retirados después de aplicarlos durante unos minutos sobre nuestra piel. Dependiendo la función será la consistencia, la fórmula y los ingredientes. Algunas mascarillas pueden tener glicólico que puede producir un leve picor, pero esto no significa que una mascarilla debe producir dolor al eliminarse.
¿Una mascarilla puede tener consecuencias a la piel?
Por supuesto que sí. El uso de mascarillas agresivas o irritantes pueden derivar en una dermatitis, irritaciones cutáneas, descamación, erosiones, heridas superficiales. A largo plazo estas mascarillas no desencadenan problemas graves, pero puede que desarrolles una piel sensible a otros cosméticos y que tu piel se vuelva intolerante a casi todos los cosméticos.
¿Se puede utilizar otro producto?
Hay muchas más alternativas para eliminar los puntos negros y que no son dañinas a nuestra piel y que en conjunto con otros ingredientes nos pueden ayudar a mejorar el aspecto de nuestra piel. Lo recomendable es utilizar limpiadores con propiedades exfoliantes, por ejemplo, scrubs para la limpieza, y cosméticos con principios activos regeneradores, como el retinol, que mejora el aspecto de la piel