Dormir pero sin descansar es un clásico. Por eso, una cadena de gimnasios británica descubrió que mucha gente acudía a hacer ejercicio para descansar un rato de las complicaciones, de ahí el surgimiento de Napercise, clases para dormir la siesta.
Se trata de un ejercicio de 45 minutos (de siesta). Los dueños de los gimnasios David Lloyd Club, ubicados en Sidcup, en Londres, afirman que vivimos en una sociedad que sufre “una epidemia del cansancio” y que es por esto que “tirarse un rato”, puede ser (muy) beneficioso para la salud. Deberíamos hacerlo en casa, sí, pero la rutina nos tiene atados al reloj, por eso, lo de hoy es ir al gimnasio para dormir la siesta.
En el gimnasio donde trabaja Lloyd, en Sidcup, hay clases donde los alumnos duermen en camas individuales y, antes y después hacen una serie de estiramientos. Durante la siesta, se puede escuchar música ambiental que incita al sueño y, por supuesto también pueden usar un antifaz. Adiós mundo cruel.
El objetivo es “revitalizar la mente, mejorar el estado de ánimo y, por extraño que parezca, quemar calorías”, según asegura la compañía en su web. Dormir mejora, además, tu sistema inmunológico, mantiene tu corazón sano y estimula tu productividad. En pocas palabras, dormir te hace feliz.
Musicoterapia, la temperatura ideal (para que el cuerpo entre en calor y queme calorías) y hasta aromaterapia. ¿Quién podría decir que no a tremendo kit? Como era de esperarse, las clases son un éxito y están saturadas todos los días, ya que se llenan de padres exhaustos y adultos con un ritmo de vida agitado y estresante, dispuestos a pagar por unos minutos más de sueño. Y no hemos hablado del mejor mercado: las mamás; el club cuenta con guardería y cuidadoras. Sin duda, una idea millonaria. ¡Bingo!