Muchas veces te has preguntado ¿cómo es que tu amiga encuentra buenas ofertas y tú apenas te decides a usar tu tarjeta de crédito? Sí, muchas veces aunque ya cuentas con este producto bancario, tienes cierta reserva para utilizarlo.
Pero no te agobies más, es una de las mejores opciones y el principal consejo que te podemos dar es conocer muy bien tu presupuesto. Sí, aunque sea obvio, muchas veces pasamos por alto cómo utilizamos nuestro dinero, de ahí que los gastos “hormiga” vayan minando tus finanzas.
Entonces, primero analiza bien tus ingresos y tus gastos. Ya que los tengas bien identificados, ahora sí, toma en cuenta que si pagas puntualmente tu tarjeta de crédito, será tu aliada tanto para tener un historial crediticio limpio como para aprovechar al máximo su uso, pues como afirma el Banco de México, sólo tres de cada diez tarjetahabientes pagan todo su saldo, y se les conoce como “totaleros”.
Y si pensaste en las ofertas y rebajas para comenzar a usarla… Déjanos decirte que son los momentos de más tentación. Sin embargo, si sigues estos consejos, podrás mantenerte moderada pero sin dejar de lado esa sensación de satisfacción al realizar una compra.
Foto: Tarjeta de Crédito (Pexels)
Usa tu tarjeta de crédito en establecimientos asociados
Actualmente, todas tienen redes con comercios que ofrecen descuentos en productos y promociones exclusivas. Entonces, primero tienes que conocer con cuáles tu banco tiene estas alianzas, qué días y una de las mejores formas de estar enterada es bajando la app de tu banco, así como checar su página web.
Cuando tienes suficientes puntos por utilizar tu tarjeta de crédito ¡aprovéchalos!
Conviértete en una experta, paga tu saldo a tiempo y tu banco te recompensará, ya que existen los programas de de puntos, como Scotia Rewards Plus, y está vigente todo el año.
Por ejemplo: si por tu trabajo o por hobby viajas frecuentemente, hay tarjetas diseñadas para este fin y a la par que haces compras, vas obteniendo estos puntos, o bien se puede hacer un intercambio de ellos: del dinero que has gastado, se te hace un reembolso, claro, si eres puntual con tus pagos, es otra forma de incentivarte para ocupar tu tarjeta de crédito.
¿A meses fijos o a meses sin intereses?
Estos casos son cuando quieres comprar algo que necesitas pero que en el momento no cuentas con todo el recurso para pagarlo de contado. Y hay diferencias entre estas modalidades. Comprar a meses fijos implica que ese producto que adquieres lo irás pagando mensualmente pero con una tasa de interés que la tienda le imponga, entonces pagas el precio del producto más ese porcentaje, no es una cantidad muy alta pero si haces cuentas, el precio se incrementa.
Y respecto a los meses sin intereses, que son los pagos más populares en comercios e instituciones bancarias, pues el precio del producto que comprarás lo vas a pagar mensualmente sin ningún porcentaje extra, o sea se traduce en que tendrás tiempo suficiente para pagarlo, su costo no subirá sólo sí cumples puntualmente con la mensualidad. También revisa el Costo Anual Total para evaluar tus compras.
Compara precios y promociones
Para que uses tu tarjeta de crédito oportunamente si optas por cualquiera de estas modalidades, es que hayas checado y comparado precios y promociones de aquello que quieres comprar, y te repetiremos que pagues puntualmente, si lo haces, te volverás experta en y sobre todo, aprovecharás lo que tu tarjeta de crédito tiene para ti.