Cuando quieres bajar de peso seguramente no habías considerado en que el estrés juega un papel importante.
Pues resulta que estar estresada puede equivaler a comer una hamburguesa con queso, aunque claro, sin el placer que esta provoca. Este alimento contienen alrededor de 303 calorías, las cuales ganarás con cada episodio de estrés que enfrentes.
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Así lo comprobó un estudio publicado por la Universidad de Yale, Estados Unidos, donde revelaron que el estrés produce cortisol; esta es una hormona que impide bajar e peso, pues aumenta los niveles de glucosa en la sangre y almacena grasa.
Otra hormona desprendida por el estrés es la hidrocortisona, que favorece la acumulación de grasa en la zona abdominal.
El estrés también es responsable de la ansiedad, la cual suele hacernos comer más, especialmente comida alta en calorías.
Algunas recomendaciones para que el estrés no controle tu vida, ni tu peso, son:
- Ejercicios de respiración: Si respiras profundamente cada que estás a punto de sufrir una crisis de estrés lograrás controlar esa sensación.
- Ejercicio físico: las actividades físicas liberan endorfinas y serotonina, neurotransmisores que genera felicidad.
- Controla lo que comes: Si en esos momentos de tensión, en vez de consumir alimentos altos en calorías, optas por alimentos que son reducidos en grasa pero te aportarán energía, calmarán tu ansiedad cuidando tu peso.