Como cada año, la Organización para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) celebra el día de hoy 16 de octubre, el Día Mundial de la Alimentación, fecha en que se organizan eventos en más de 150 países de todo el mundo, convirtiéndolo en uno de los días más celebrados del calendario de la ONU.
Los eventos del Día Mundial de la Alimentación, promueven la concienciación y la acción a escala mundial enfocada a todos aquellos que padecen hambre, y buscan garantizar la seguridad alimentaria y dietas nutritivas para todos.
La importancia de este día, radica en que el hambre sigue siendo un problema mundial, pues a pesar de que se producen alimentos suficientes para sustentarnos a todos, alrededor de 800 millones de personas padecen hambre. Es decir, una de cada nueve personas. El 60% de ellos son mujeres.
Aún cuando la alimentación es un derecho humano básico, el hambre mata a más personas cada año que la malaria, la tuberculosis y el sida juntos, y alrededor del 45% de las muertes infantiles mundiales están relacionadas con la desnutrición. Una de las causas de esta alarmante realidad, es que un tercio de los alimentos producidos en todo el mundo se pierde o desperdicia, y cabe mencionar que nuestro planeta necesitará producir un 60% más de alimentos de aquí a 2050 para sustentar a una población creciente.
Por todo esto, la FAO trabaja en conjunto con gobiernos, sociedad civil, el sector privado y otros socios para alcanzar el Hambre Cero, teniendo como meta el año 2030 para alcanzar el ambicioso propósito de erradicar el hambre, protegiendo el clima mundial, y abordando algunas de las causas fundamentales de la migración y el desplazamiento. Lograrlo no es posible sin acabar con el hambre y sin tener una agricultura y unos sistemas alimentarios respetuosos con el clima, sostenibles y resilientes que provean para los recursos necesarios personas y el planeta.