Jared Leto, Lupita Nyong'o y Rihanna en el Fashion Show de Prada.
Superar un desfile de Louis Vuitton es difícil, pero de alguna manera Miuccia Prada lo logró gracias a Lupita Nyong’o y Jared Leto.
El par de ganadores del Oscar, cuya relación es objeto de muchas conjeturas, fue invitado por la diseñadora italiana al desfile de la plastificada colección otoño-invierno de Miu Miu en París.
Y por si eso no fuera suficiente como para llamar la atención, Nyong’o tuvo que cambiarse de lugar para que Rihanna, quien llevaba una enorme abrigo de piel, pudiera caber en la primera fila.
Mientras tanto, el exdiseñador de Balenciaga Nicolas Ghesquiere tuvo un debut admirable en Louis Vuitton al que asistieron la princesa Charlene de Monaco, Catherine Deneuve y Charlotte Gainsbourg.
Pero el fantasma de Marc Jacobs no se alejó, después de todo tras 16 años de desfiles impactantes Jacobs rondaba en la imaginación de muchos.
Volviendo al tema de Nyong’o y Leto, desde antes de que el actor agradeciera en broma a “mi futura esposa Lupita” en su discurso en los premios Spirit, se ha conjeturado que él y su colega ganadora del Oscar a la mejor actriz de reparto podrían tener algo más que aprecio profesional.
La actriz de “12 Years a Slave” solo se ha reído cuando le preguntan por el asunto, especialmente en “The Ellen Show” con la presentadora de los Oscar Ellen DeGeneres.
Ahora, para aumentar el escándalo, ambos estuvieron en el Fashion Show de Miu Miu en París, sufriendo juntos el cambio de horario.
Nyong’o, quien dijo que le “gustó mucho el desfile” se veía radiante con una chaqueta de Miu Miu sencilla con un cuello blanco con bordado, una minifalda rosa pálido y zapatos de tacón blancos.
Leto en cambio usó un traje obscuro con una mascada azul eléctrico y unos zapatos de charol con adornos dorados y admitió que estaba exhausto.
“Pero es el mejor tipo de cansancio que se pudieran imaginar”, dijo evitando comentarios sobre su posible relación con Nyong’o.
Con un toque de ironía Prada envolvió toda la sección del Consejo Ambiental de París, donde se realizaba el desfile, con plástico no biodegradable.
Su propuesta estaba llena de modelos jóvenes y coloridos para mantenerse calientito durante el otoño y el invierno.
Faldas transparentes de PVC azul junto a un impermeable amarillo brillante con borlas deportivas o botas para la lluvia en rojo transparente, que se mantenían con clase al mezclarse con toques de esquí y abrigos tejidos.
No todos los modelos tuvieron el mismo éxito, pero algunos abrigos grandes en piel blanco y negro fueron destacados.
Además hay que admirar el talento e la diseñadora. ¿Quién más podría mezclar exitosamente una clásica falda tableada de seda en amarillo claro con una chaqueta con capucha multicolor?