Conmoción mundial causó la revelación de los llamados “Paradise Papers”, resultado de una investigación del diario alemán Süddeutsche Zeitung, realizada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), donde se explica cómo diversas figuras mundiales invirtieron en compañías con fondos en paraísos fiscales. Una de ellas es nada más y nada menos que la reina del pop, Madonna.
Según el extenso reportaje, la reina del pop adquirió 2.000 acciones de SafeGard Medical Limited en 1998, teniendo intereses en una empresa de suministros médicos con la particularidad de funcionar en las Islas Bermudas. Lo raro, además, es que Madonna no participa directamente en la operación, sino que a través de uno de sus asistentes, Shari Goldschmidt.
Además de la diva musical, hay otras reconocidas figuras involucradas en estos fraudes fiscales, tales como Bono de U2, la reina Isabel II de Inglaterra; el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos; el secretario de Estado Comercio de EE UU, Wilbur Ross; Stephen Broffman, amigo íntimo del canadiense Trudeau, y su recaudador de fondos; el excanciller alemán Gerhard Schröder, quienes conforman la lista de la mayor filtración de paraísos fiscales en la historia que ha destapado el Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación (ICIJ).
Aunque no han hecho muchas declaraciones al respecto, el cantante de U2 respondió en la investigación diciendo que era “un inversionista pasivo y minoritario en ‘Nude Estates Malta Limited’, una compañía que estaba legalmente registrada en Malta hasta que se liquidó voluntariamente en 2015”.