Salón abuhardillado con chimenea

Salón abuhardillado con chimenea

Es frecuente que las casas unifamiliares dispongan en el ático de un amplio espacio abuhardillado. Este habitáculo puede aprovecharse con muy buenos resultados para habilitar un confortable salón con chimenea.La nota más significativa para dar con un acertado interiorismo se encuentra en no perder el estilo urbano y actual, combinado con pequeños matices personales. Un ejemplo ilustrativo reside en las múltiples obras pictóricas que ornamentan la pared o en la piel que reviste de uno de los dos sofás de la fotografía.Para acentuar la atmósfera confortable en el techo inclinado se ha dispuesto de un gran vano cenital que proporciona luz exterior y mayor calidez, realzando el estilo actual del espacio.El color blanco aparece como uno de los grandes protagonistas en la decoración de este salón, ya que las paredes y los dos sofás enfrentados se han revestido en dicha tonalidad. Pese al papel destacado del blanco, el centro de todas las miradas reside en la antigua chimenea de mármol gris. Para su instalación ha sido necesario un hueco de obra, y cuenta, a su izquierda, con un pequeño rincón para almacenar la leña.La chimenea, que multiplica la calidez de la estancia, queda integrada con la gran cantidad de cuadros que revisten la pared, creando cierta unidad decorativa, aparte de potenciar el talante actual y urbano. Un talante que también está remarcado por la gran mesa cuadrada de centro, confeccionada con bloques de piedra y sobre de cristal.

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