Ya no sabes qué hacer con las legumbres, la pasta, las especias. Si los guardas en la despensa, que ya está hasta los topes, te cuesta encontrarlos. Si quieres tenerlos a mano en la cocina tampoco encuentras el sitio apropiado. ¿Y si utilizas unos tarros de cristal y los pones ordenados en la encimera? Podría ser la solución ideal.En la encimera, en un estante abierto, tras una puerta de cristal – donde creas que puedas tenerlos al alcance de la mano-. Guardar los alimentos en tarros de cristal es, al mismo tiempo, un elemento decorativo y a la vez práctico. Puedes ver el contenido y así lo identificas de forma rápida y también es una buena forma de que se conserven con todas sus propiedades.En el mercado los puedes encontrar de todas formas, tamaños y cierres. Más alargados para la pasta, más pequeños para las especias, la sal o el azúcar, más anchos para el arroz, la harina o las legumbres. Solamente tienes que tener en cuenta que la tapa sea hermética para que el aire no penetre y así los alimentos no se estropeen. Como son transparentes puedes ver cuanta cantidad tienes y apuntar lo que te hace falta para la próxima lista de la compra.