Conoce las 3 emociones que te ayudan a adelgazar

Es un hecho que los hábitos influyen en nuestro cuerpo y las emociones también nos ayudan a bajar de peso y tener un estilo de vida más saludable. Así que si llevas meses o incluso años, intentando bajar de peso comiendo sólo jugos y ensaladas, pero con emociones y pensamientos tóxicos, es mejor que lo olvides. Recuerda: mente sana en cuerpo sano.

Emociones que adelgazan.  Si bien hay hay emociones que te suben de peso como la culpa, enojo, estrés, odio e ira, existen tres emociones que te ayudan a adelgazar. ¿Lista para conocerlas?

1. Positivismo. Tener la idea constante de que ‘estás gorda’, tiene un gran efecto negativo pues el  cerebro no distingue si es verdad o mentira, pero el patrón tan reiterativo hace que nos la creamos y entonces si piensas que un antojo te engordará, en efecto lo hará porque inconscientemente ya elevaste la hormona de cortisol que te provocará culpa, ansiedad y por lo tanto, sobrepeso

2. Agradecimiento. Para los amantes de la psicología positiva, ser una persona agradecida te abre las puertas para que mejores cosas lleguen y se manifiesten en tu vida, por lo que si eres un ser que además de pedir, agradece cada una de las cosas que tiene, pensarás con más claridad, tomarás mejores decisiones, no vivirás desde el miedo y por tanto no te autodestruirás con pensamiento negativos o bien tus periodos de  comer por impulso o estrés desaparecerán.

3. Fluidez emocional. Seguro has escuchado esto una y mil veces, pero es verdad: cuando fluyes sin obsesionarte con la báscula o con contar las calorías y empiezas a  disfrutar de los alimentos sin culpas, notarás cómo tu peso es perfecto.

No estamos diciendo que si comes un litro de helado diario o comida chatarra no subirás de peso, sino que  ahora tu comida saludable, ejercicio e incluso tus postres ocasionales, funcionarán mejor porque llevarán una intención consciente de bienestar, belleza y salud. Por eso, estas tres emociones te ayudan a adelgazar, porque estás en un momento positivo en donde tienes paz contigo misma y con la forma en que te percibes y esto siempre tiene un impacto en tu peso.

 

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