Una dieta que funciona bien cuando se siguen todas las reglas.
La dieta desasociada consiste en hacer tres comidas principales con un primer plato rico en verduras y un segundo separando proteína animal y legumbres y cereales. La primera regla es no mezclar proteínas con hidratos de carbono. Por ejemplo, no puedes mezclar las frutas con los lácteos. Entre comidas deben pasar por lo menos 4 horas.
Para que la dieta disociada sea saludable y efectiva, es muy importante que el alimento tomado a lo largo del día sea completo a nivel macro nutrientes, es decir, si se compensa la cena con lo que no se ha comido a medio día.
Te damos otro ejemplo:
Desayuno: Café o té, frutas cítricas y 3-4 nueces.
Media mañana: Té o yogur y pavo o jamón serrano.
Almuerzo: Para el primer plato ensalada con hortalizas; para el segundo plato arroz con verdura; de postre una manzana.
Media tarde: 1-2 tostadas de pan de centeno y aceite de oliva.
Cena: Verdura y proteína animal y de postre una fruta.
El agua se debe tomar en grandes cantidades, pero nunca con las comidas, siempre entre horas. Si mientras se come, se siente sed, en cuanto se beba agua, se deja de comer.
¿Estás lista para comenzar esta dieta?