"Espejo público" cumple mañana dos años de recorrido en Antena 3 con una progresión ascendente que le sitúa esta temporada en la segunda opción dentro de la programación matutina con un 18% de media, tres puntos más que el año anterior. Su conductora, la periodista catalana Susana Griso, abarca un amplio horario que podría haber convertido en este magazín en un cajón de sastre, pero ha sabido mantener una coherente línea donde domina la información y la actualidad en detrimento de la crónica social. «De casta le viene al galgo», dice esta periodista que se forjó en los informativos de la cadena de Planeta.-Está ya muy cerca de la audiencia del programa de Ana Rosa, un 19,6%, aunque sube a 20,4% en la franja coincidente.-Todo el mundo nos acaba comparando, pero yo tengo muchos referentes. Empiezo compitiendo con "Los desayunos de TVE" (Pepa Bueno), con "La mirada crítica" (María Teresa Campos). Es un programa puente que empieza a las 9 horas y termina a las 12.30. El duelo no sólo es con Ana Rosa, pero os fijáis mucho en ella.-¿Qué le parece el programa de Ana Rosa?-No me hagas opinar sobre eso. No seas mala.-¿Cuál ha sido la clave para subir audiencia?-Tocamos todos los palos y bien. Aspiramos a ser referente de la información y lo estamos consiguiendo. Nuestra tendencia es ir a la actualidad. Nunca quise dar el salto a programas que no fueran estrictamente informativos. Y ahora tenemos espacio para la información, el entretenimiento e incluso la formación, porque el programa tiene una parte de servicio.-¿La política interesa más ahora?-Está en un punto en el que interesa más. He notado esa evolución.-¿No se está creando una cierta alarma social con el énfasis en la crisis económica desde los medios de comunicación?-Es posible, y no me gustaría que pasase. Pero, como nuestro nombre indica, somos espejo de lo que hay en la calle, y reflejamos muchas de las preocupaciones que existen. Eso sí, hay que informar en algunos aspectos de una manera positiva.-También el reporterismo a pie de calle ha ido ganando terreno frente a la prensa rosa.-En mi caso, totalmente. A la alfombra rosa le dedicamos sólo 20 minutos. Todos los temas son susceptibles de ser tratados pero, evidentemente, lo que más me interesa es la información pura y dura, que es donde damos el do de pecho. Y yo detecto un cierto hartazgo de temas de corazón mientras sube la demanda informativa a primera hora de la mañana.-En las mañanas televisivas siguen dominando las mujeres ¿Es casualidad?-No lo sé. El perfil de nuestra audiencia es muy heterogéneo, y a primera hora el porcentaje de hombres y mujeres es equivalente. Pero alguna vez me he planteado si no hay un cierto machismo en el hecho de que en las mañanas de la radio dominen los hombres y en la televisión sean las mujeres.