Aunque algunos niños en algún momento se interesan genuinamente por el tema de la muerte, generalmente en casa no se les habla sobre eso, a menos de que haya ocurrido un deceso cercano. Sin embargo algo es un hecho: tarde o temprano tendrás que sentarte a hablar con tu hijo sobre aquel proceso natural de la vida, y es mejor que estés preparada.
¿Cómo hablarle a un niño sobre la muerte?
Es increíble que algunos padres antes de hacerse esta pregunta, se cuestionen si es bueno hablar con sus hijos pequeños sobre la muerte, pues ignoran que ellos, a pesar de ser menores de edad, se dan cuenta de absolutamente todo lo que los rodea. Entonces imagina el desconcierto que siente un niño cuando en la familia alguien muere y él no lo sabe, o en las noticias se habla sobre muertes y nadie le explica qué es lo que está pasando.
Lo primero que haces cuando le ocultas esta información a tu hijo, es convertir a la muerte en un tema tabú. Posiblemente te excuses con la idea de que no quieres que tus hijos sufran o tengan preocupaciones, pero piensa que aún así las dudas persistirán en ellos.
¿Cómo perciben la muerte los niños?
La percepción que los niños tengan sobre la muerte tiene que ver con su edad. Por ejemplo, los preescolares suelen creer que la muerte es un suceso reversible, justo como en las caricaturas. Entre los 5 y 9 años los niños comienzan a darse cuenta de que la muerte es algo irreversible, y que todos tenemos que pasar por ella. Algunos estudios dicen que a esa edad es común que la muerte se asocie a un esqueleto, o a un ángel. A partir de los diez años, y durante la adolescencia, los niños ya comprenden plenamente que la muerte es definitiva, y comienzan a cuestionarla filosóficamente.
Consejos para explicarle la muerte a un niño
Los expertos aconsejan explicarle este suceso a los niños con términos muy sencillos. El doctor Earl A.Grollman documenta en su libro Explaining Death to Children, que sencillamente hay que explicarles a los niños que cuando las personas se mueren ya no respiran, no comen, no hablan, no piensan y no sienten.
Usar metáforas no sirve. No le digas a tu hijo que la persona fallecida “está en el cielo”, ni que está “descansando eternamente”, pues los niños pequeños suelen confundir la muerte con el sueño, y después podrían desarrollar miedo a dormir.
Es muy importante que así como tú debes pasar por un duelo tras el fallecimiento de alguien, le permitas a tu hijo que haga lo mismo. No debes tener temor en mostrarle a tu hijo el dolor que sientes tras la pérdida de alguien, pues él entenderá que la muerte es un acontecimiento que afecta profundamente, que es normal, y que todos vivimos el mismo sufrimiento.
Así que deja que tu hijo exprese su dolor de la forma que él quiera. Algunos niños realizan juegos, o simplemente no quieren ir a la escuela, y debes respetar su decisión. Ocupa ese tiempo para realizar un ritual de despedida con tu hijo.
Otra excelente alternativa es buscar material didáctico o de entretenimiento que le ayude a tu hijo a entender la muerte. Una opción es el cuento de Ana Luisa Ramírez titulado Así es la vida, que habla sobre los aprendizajes que tiene el ser humano a través de su vida, y cómo la muerte es una situación más que hay que aprender a aceptar.
No olvides que…
Cuando un niño pregunta es porque quiere respuestas, así que responde con sinceridad y tacto.
Si tu hijo acaba de sufrir la muerte de su mascota debes leer este artículo para ayudarlo a reponerse.