Muchas veces hemos visto la reacción de nuestras mascotas al venir de otro lugar y llevar aroma de otra mascota o el instinto del gato a extenderse sobre tu teclado cuando vas a trabajar o cuando te despides de una persona y tu perro comienza a ladrar. Justo en el momento en el que tu atención se posiciona en otro lado, las mascotas se ponen celosas o al menos eso es lo que nosotros pensamos, sin embargo, los especialistas en conducta de animales o etólogos, siguen mostrándose escépticos con respecto a si los animales domésticos son presa de los celos que nos atormentan a los seres humanos.
La mayoría de los estudios comprueban que los perros sienten emociones básicas como la ira, alguno otros estudios de psicología animal han revelado que existe una amplia gama de diferentes manifestaciones de emociones como alegría, sorpresa y pánico, por lo tanto, Paul Morris, Profesor de psicología de la Universidad de Portsmouth en Inglaterra, cree que las mascotas poseen la capacidad de tener sentimientos más complejos como lo son los celos.
Varios estudios incluyendo el de Morris, han demostrado que los animales que no pertenecen al orden de los primates son capaces de demostrar emociones secundarias, como culpa, vergüenza y orgullo. Sin embargo, en vez de basarse en respuestas neurobiológicas o fisiológicas para investigar sobre sus sentimientos primarios como la ira y el miedo, los los datos sobre las emociones más complejas, o sea, las secundarias, las han basado en informes de personas acerca de cómo actuaban sus mascotas.
Ya sean celos o no, lo cierto es que los perros y gatos sufren angustias y confían en las personas que los cuidan para recibir algo más que alimento y refugio.
Razones por la que tu mascota siente celos
- Cambios importantes en la familia como llegada de un bebé.
- Despoje de algún mueble propio del animal u algún otro del que sienta afecto.
- Ver tener muestras de amor a su dueño o dueños con otra persona.
- Olfatear el contacto con otro animal.
- Llevar a casa a una nueva mascota.
Los animales son seres vivos sensibles de los cuales debemos estar muy atentos pues ellos aunque no lo creamos tienen emociones.