Administrar un hogar se escucha sencillo pero no es tarea fácil, sin embargo existen ahora muchos métodos que podemos utilizar como apoyo para que nuestras finanzas no vayan en declive, uno de esas fórmulas en las que nos podemos apoyar es con la regla de 50-20-30 para lograr nuestras metas financieras durante este año.
Siempre he pensado que, si consideramos nuestro hogar como un hotel nos será mucho más fácil entender la administración del mismo, haciendo un presupuesto lo más detallado posible y apegado a la planeación anual del mismo.
Todo hotel, cuenta con cierta manutención, para que éste luzca impecable, así mismo se necesita realizar una planeación de mantenimiento, así como de remodelación, de manera que siempre nos sintamos en un lugar acogedor y en buenas condiciones. Para poder realizar esto, todo parte de un presupuesto.
GASTOS FIJOS
Suena muy complicado, pero realmente son matemáticas de las más simples, es cuestión de sumar y restar. Es importante revisar punto por punto cuales son indispensables para vivir, pero que quizá se puedan hacer ciertos ajustes, tales como:
- Renta o hipoteca: este normalmente es fijo o se ajusta con la inflación.
- Luz, gas y agua: Hay que sacar el promedio anual, para dar una provisión mensual de lo que pagaras en total.
- Comida: Con las notas del súper, saca la suma de todas ellas y obtén el promedio para calcular el aproximado que utilizarás.
- Seguros: En caso de contar con algún seguro solo debes considerar la inflación, para ser recalculado.
- Colegiaturas, uniformes, libros: Aunque no sean constantes éstos son considerados como fijos.
MÍNIMOS INDISPENSABLES
Son aquellos que no podemos escapar y que son necesarios, tales como: teléfono, gasolina, internet etc.
GASTOS VARIABLES
Son aquellos de los cuales, si podemos controlar, dependiendo el efectivo con el que contamos y es para: ropa, gastos de diversión, restaurantes, cines, viajes, libros etc.