Existen varias razones por las que las parejas deciden dormir en camas separadas o en cuartos diferentes. Por mucho tiempo que lleven juntos, cada persona necesita diferentes cosas, como que uno quiere leer, pero el otro no quiere luz; uno se levanta temprano, el otro es sensible al sueño; y así sobran la cantidad de situaciones.
Sin embargo, esta situación tiene sus ventajas y desventajas. ¡Conozcamos algunas!
La principal ventaja es tener total autonomía de movimientos y horarios, también le da a la pareja la posibilidad de dormir juntos o no. Dormir separados puede generar interés y aumentar el deseo, ya que no se sabe cómo será cada noche. Si algo necesitan dos personas para no morir en el aburrimiento, es un poco de incertidumbre. Esta podría ser una manera de lograrlo.
Pero también tiene desventajas: El contacto cuerpo a cuerpo es muy placentero y eso puede acercar a las personas que, por falta de tiempo, están alejadas. Además, se sabe que muchas parejas resuelven sus asuntos en la cama y, si estuvieran separados, eso implicaría una acción más explícita por parte de alguno y podría funcionar como un obstáculo.
Las parejas que toman esta decisión no significa necesariamente que se amen menos, aunque también podría ser. En la mayoría de los casos significa más bien una necesidad de mantener el amor de otra manera.