Inician los planes de boda, lo más importante es decidir si queremos una boda de día o una boda de noche, pues en base a eso planificaremos todo, el vestido, la decoración, las fotos… todo.
Aquí algunas ventajas de celebrar tu boda de día:
- ¿Que se acabó la fiesta? Las bodas que se celebran de día suelen durar más. Por si fuera poco, tus invitados no tendrán excusa para no quedarse bailando hasta el final.
- Las mejores fotos. Aunque seguro un experto detrás de la lente puede trabajar con todo tipo de iluminación, lo cierto es que todo lucirá mejor con la luz natural del sol.
- De colores. Podrás elegir de entre una gama de colores muy divertida, mobiliario con diseño único y texturas que combinen con los acentos estéticos del gran día.
- Menos formal. ¿Qué tal un estilo boho chic? El día es tu mejor opción. Aprovecha la luz del sol para crear un ambiente fuera de serie, en donde no serán necesarios los altos tacones, las grandes joyas o los diseños muy complicados.
- Más opciones de postres y bebidas. Podrás incluir una mesa de postres que incluya helados artesanales. Si lo prefieres, tu proveedor de bebidas será capaz de diseñar originales cócteles. Colores y sabores increíbles para comer y beber.
El clima, las horas pico y, por supuesto, la conveniencia de tus invitados, influyen en tu elección. Una boda de día amplía tus horizontes.
Las bodas bajo la luz del sol te permiten apreciar más de cerca los vibrantes colores del cielo, la llegada de la tarde y la majestuosidad de los árboles.
Una vez que termine la boda, tus invitados y tú podrán transportarse a su casa (o en tu caso a la luna de miel), sin la preocupación de que sea muy tarde. Esa probablemente es una de las más grandes ventajas de una boda de día.