Es tiempo de hablar de anillos, esas simbólicas joyas que toda mujer presume. Desde el anillo de compromiso y hasta la churumbela, hay algunas cosas que debes saber sobre los anillos.
No existe una regla sobre la entrega y uso de anillos, es más una tradición. Existe un cuarto anillo, o quinto si es que decidieron darse el de promesa antes, que “toda mujer casada” necesita. Vamos por partes.
- Promesa. Es el primero de los anillos que un hombre puede dar a su pareja para demostrar su amor, fidelidad y entrega. Suelen ser sencillos y pueden incluir una pequeña piedra. Se dan durante el noviazgo y lo más importante es que quieren decir que la relación va tan bien que podría darse el siguiente paso.
- Compromiso. El más esperado. Después de que tu novio te pregunte el “¿Te quieres casar conmigo?”, él deberá poner en tu dedo anular de la mano izquierda un anillo de oro o plata. Se pone en este dedo porque antiguamente se creía que en él hay una vena, la vena amoris, que va directamente al corazón y así se daba a entender que este símbolo representa un compromiso formal de matrimonio.
- Argollas de matrimonio. Para celebrar la alianza nupcial que los unirá por siempre. Después de la boda es tradición usarlos en el dedo anular junto con el anillo de compromiso.
- Chrumubela. Se trata de un anillo de celebración. Hay quienes los dan con el nacimiento del primer hijo y quienes prefieren reservarlos para los aniversarios más importantes como 10, 15 o 20 años. Estas piezas suelen tener, a diferencia de las argollas, mucho detalle y garigoles.
- Presente, pasado y futuro. El anillo suele ser de oro o platino con tres piedras, cada una representa el tiempo que han compartido juntos: el pasado, el presente y el futuro. Este anillo se regala después de los 10 años de casados y sustituye al anillo de compromiso.