Elegancia, color y sencillez son las palabras que definen a una boda en jardín. Solamente hay que saber explotar la magia de cada espacio y emplear toda la creatividad posible.
Una boda en jardín puede ser sofisticada, todo está en los detalles. Aquí una lista de elementos básicos para la decoración del lugar, y así lograr una boda de ensueño.
- Colores. El color que caracteriza el estilo de boda en jardín es el blanco, tanto en paredes como en los muebles. Da una sensación de amplitud. Colores como el rosa, el azul, el menta y todos los tonos pastel son muy característicos de este estilo y siempre deben ir combinados con el blanco.
- Flores. Son, sin duda, las mejores aliadas. Si son naturales, mejor. Decora las mesas con hermosos follajes y flores a modo de centros de mesa.. Utiliza flores similares (¡ojo! jamás iguales) a las de tu ramo para no perder la esencia ni el concepto.
- Mobiliario. Los reyes son la madera y el hierro. Normalmente vemos los muebles pintados de blanco, y para completar el estilo, éstos deben verse avejentados o desgastados. Así resaltan las tendencias vintage y boho-chic.
- Las telas. El encaje, la gasa y el lino son algunos de los textiles que podrías utilizar.
- Biombo de fotos. Una gran idea es armar biombos de madera, plástico o metal con fotografías de sus momentos favoritos.
- Carpa. No te olvides de incluir en el presupuesto esta estructura que permitirá a los invitados disfrutar del jardín sin ser víctima las inclemencias del tiempo.
- Iluminación (Cuando la boda es de noche). No existe nada más romántico que la luz de las velas y con ellas puedes decorar e iluminar al mismo tiempo.
- Columpios. Son también una opción súper romántica para las bodas en jardín. Con un toque de decoración floral bastará.
- Mesa de dulces. Puedes decorarlas con flores. También puedes colocarlos y decorar con maletines antiguos y en pizarrones escribir el nombre de cada dulce.
- Letras gigantes. Están de moda. Estas servirán como el escenario perfecto para las románticas fotos después de la misa.