Las bodas son el evento más importante para una pareja de novios enamorados, todo tiene que estar perfecto, desde lo más simple como las invitaciones hasta la complicada y dificil elección del vestido de novia. Hay muchos elementos que no se pueden dejar en cuestión de azar, uno de ellos es la comida.
Hoy en día los millennials han cambiado las tendencias en este último aspecto, la selección gastronómica ya no es la misma que hace 5 años, con el paso del tiempo las tendencias cambian tan rápido que cuesta seguirle el paso, sin embargo para esta generación lo de hoy es la famosa “tendencia foodie”.
Cada vez más, los novios están preocupados porque sus invitados se vayan a casa con una buena experiencia y con un buen sabor de boca, es por eso que con las tendencias gastronómicas los novios busquen tener un equilibrio entre lo “oldie” y el “trending”.
Esto ha provocado que se pongan de moda las ideas híbridas como los food trucks (camiones con comida) o el live cooking, tal cual, al estilo del sushi japonés pero con productos 100% orgánicos y que nos regala la madre naturaleza.
Te compartimos algunas tendencias que deberías tomar en cuenta si quieres que tu boda se convierta en un verdadero acontecimiento millennial.
Si la celebración es a medio día los aperitivos de pie son la opción, estos aperitivos son una gran fusión gastronómica con recetas internacionales que son irresistibles para los invitados.
Actualmente la tendencia es la innovación en la alta calidad de la comida y respeto al medioambiente, usar productos de los mercados locales es de suma importancia, si son orgánicos mucho mejor. Te garantizamos que encontrarás, no importa la temporad,a productos frescos y con mucho sabor.
Volver al origen con recetas de la abuela, presentar la comida en tamaño mini, los mash-up (que lo mismo se mezcla comida oriental y occidental) los famosos live cooking (donde hay personas preparando en ese momento la comida) hasta los regalos comestibles (como miel de abeja o botellas de vino para los invitados como recuerdo) son parte de las experiencias gastronómicas que son tendencia en las bodas millennials.
A todo esto súmale la comida non-stop con una barra libre de postres o helados o una estación de chocolates, churros rellenos y cupcakes.