Una de las salsas italianas más famosas es la llamada pesto. Solo se necesitan unos minutos para prepararlo y es infinitamente mejor que cualquier otro pesto que puedas comprar enlatado. ¡Sigue la receta!
Ingredientes:
- 110 g de hojas de albahaca fresca
- 150-225 ml de aceite de oliva virgen extra
- 25 g de piñones frescos
- 2 dientes de ajo grandes machacados
- 50 g de queso parmesano rallado muy fino
- Sal al gusto
Preparación:
Mezclar la albahaca con el aceite de oliva, los piñones y el ajo en un batidor de cocina o en un mortero. Poner en un bol e incorporar el queso parmesano rallado. Probar y condimentar.
Servir con pasta, queso de cabra, tomate y mozzarella. El pesto resulta ideal para ensaladas o espolvoreado sobre tortillas o fritos.
Este puede conservarse durante semanas si está cubierto con una capa de aceite de oliva en un bote y se guarda en la nevera. También puede congelarse, pero en este caso no debe añadirse el queso parmesano hasta que esté descongelado. Para una mayor comodidad, congelar en cantidades pequeñas.
Las hojas de albahaca también pueden congelarse; no será aconsejable utilizarlas para hacer pesto, pero si podrán utilizarse en sopas y estofados de verduras para añadirles un toque veraniego.