Sí, a las mujeres nos encanta recibir atención (pero no tanta), especialmente si viene de nuestro galán. Si más que un novio atento tienes a un novio controlador, aléjate (y cuéntaselo a quien más confianza le tengas).
- Si es un stalker. Se la pasa revisando tus redes sociales para saber qué publicas, con quién interactúas y a qué le das likes, no es amor. Si además te ha pedido la contraseña de tu cel, está frente a un controlador.
- Si es un hombre celoso. Peor aún si no se controla. Puedes ponerle fin o tener que lidiar para siempre con esta situación de miedo y control.
- Si cree que le perteneces. Te gustaría romper con ello y hacer cosas por tu cuenta pero él hasta tiene planeado lo que cenaréis dentro de una semana. Tiene que controlarlo y planearlo todo lo cual no te deja tiempo para ti misma.
- Controla tus relaciones. No soporta que salgas un fin de semana con tus amigas y te presiona para que te quedes con él excusándose con que le dejas solo. No quiere que estés con tus amigas, tan solo tú y él.
- Si te critica. Existen hombres que para sentirse mejor consigo mismo necesitan hacer sentir mal a los demás. Infravalorar tus éxitos, criticar todas tus decisiones o simplemente tu manera de vestir.
- Decide por ti. Un novio controlador tomará decisiones por ti cada vez que tenga oportunidad de hacerlo, sin preocuparse por tu opinión, pues eso lo hará sentir más seguro.
- Es obsesivo. Tratar con un fanático del control puede ser agotador, especialmente cuando tu pareja está siempre a la defensiva por todo lo que haces.
- Si intenta cambiarte. Harán todo lo posible porque cambien y se adapten más a lo que ellos buscan, sin importar si esto implica pedirles que se vistan diferente, que renuncien a sus hobbies o a algunas formas de pensar.