El trabajo en equipo siempre es mejor, bien dicen que dos cabezas piensan mejor que una y siempre es bueno escuchar las inquietudes de los demás es por eso que son tan importantes las reuniones de trabajo en la que se realizan “lluvia de ideas” para llevar a cabo los proyectos.
Una lluvia de ideas puede significar una solución a varios problemas sin resolver en el trabajo o para el lanzamiento de un proyecto nuevo. Si se realiza correctamente puede ser muy productiva.
¿Cómo lograr una eficiente lluvia de ideas con un equipo de trabajo?
1 – Tener claro el punto o tema a tratar
Para evitar que la reunión se convierta en una plática de café que les haga perder el tiempo es importante tener claro qué se va a hacer y por qué. Así que hay que definir el tema a tratar o sobre el cual arrojarán las ideas.
2 – Establecer reglas
No se trata de ser estrictos pero si ordenados, si tienen un moderador que de la palabra a cada uno de los participantes se evitará pérdida de tiempo y que esa junta parezca mercado. Además podrán escuchar las ideas de todos sin interrupciones.
3 – Envía un correo previo con la información general
Para evitar explicar el objetivo muchas veces, lo mejor es que hayas proporcionado la información antes así la mayoría tendrá una vaga idea de lo que compartirán. Habrá quien llegue con alguna información en específico que quiera compartir y que genere la solución a lo que buscan. La reunión puede ser mucho más rápida y productiva.
4 – Dejen fuera la tecnología
Invita al equipo a apagar celulares y dispositivos móviles, nada como mantener la atención de todos y si es posible que acudan con un cuaderno y pluma, a veces tomando nota se despliega la creatividad.
5 – Inicia y toma nota
Todas las ideas apúntalas en un pizarrón o mural, en una lluvia de ideas ninguna es buena ni mala, todas son valiosas y al final podrán ir descartando y viendo si son viables o no.
La ventaja de este ejercicio es que a partir de una gran idea se puede iniciar a trabajar y todos se sentirán involucrados