Cualquier información que publiques en la red puede ser utilizada en tu contra.
Los datos personales no están seguros en la red, por lo que debes tener cuidado con todo lo que haces o posteas.
Nunca confíes, ya que nada en internet puede estar bajo control al 100 %. Por eso…
- Elige bien tu contraseña o claves, pero a la vez que sean fáciles de recordar. Lo ideal es que combines números y letras.
- No te registres en sitios que no conoces, ya que estos normalmente envían correos basura (spam).
- Al hacer la contraseña, también se crea la famosa pregunta secreta. Para esto, lo recomendable es que no sea muy obvia, así no cualquiera podrá responder.
- Existen sitios web que no se cansan de enviar publicidad. ¡Demasiado molesto! Una opción fácil es bloquear esa publicidad mediante extensiones de AdBlock presentes en la mayoría de los navegadores web. De esta forma, evitaremos malwares y que nos roben las credenciales de Facebook.
- Cuando te registres en un sitio web, es mejor que rellenes el campo de “fecha de nacimiento” con una información falsa. Si una web es intervenida por piratas informáticos y hemos incluido la fecha de nacimiento correcta, nuestra privacidad podría verse comprometida.