La gripe del pollo

Si pregunta en su carnicería habitual le dirán que la carne de pollo puede consumirse "con absoluta tranquilidad". El brote de gripe aviaria está miles de kilómetros y las fronteras están cerradas a la importación de los países afectados. Sin embargo, los avicultores han comenzado a detectar, con cierta impotencia, cómo poco a poco las ventas se retraen.Los productores de pollo españoles se afanan en remarcar que el 100% de la carne fresca de pollo que se consume en España procede de nuestras granjas y está totalmente garantizada. ¿Por qué? Porque no parece controlarse demasiado bien la gripe aviaria, o gripe de las aves, surgida a finales de 2003 en la cabaña avícola asiática. Se habla de epizootia (epidemia en animales), pero ya son muchas las personas muertas a causa de esta "influenza aviaria hiperpatógena".La enfermedad se aproxima. La Organización Mundial de la Salud (OMS) no sólo ha confirmado diversos brotes originados por el virus H5N1 en Corea del Sur, Vietnam, Japón, Tailandia, Camboya, China, Laos, Indonesia, Taiwán y Pakistán, sino también en Turquía, Rumania, Grecia, y la Rusia europea.El Gobierno extrema precauciones y controles en la cabaña avícola, si bien no considera de momento necesarias medidas excepcionales. La Interprofesional de la Avicultura de la Carne de Pollo, Propollo, insiste en recordar las excelentes medidas sanitarias que rodean la producción de carne de pollo, el control veterinario, la asepsia de las salas de sacrificio…"Todo está absolutamente controlado", asegura la organización.La enfermedadLa influenza o gripe aviaria, también llamada "gripe del pollo", es una enfermedad infecciosa identificada por primera vez en Italia hace 100 años. La originan hasta 15 subtipos de virus tipo A altamente contagiosos entre animales. El Ministerio de Sanidad y Consumo (MSC) reconoce que si no hay vigilancia y control de estos brotes, las epizootias pueden prolongarse durante años.La gripe aviaria se propaga fundamentalmente cuando las temperaturas son bajas y sus agentes patógenos desaparecen a temperaturas superiores a 70º C. Su transmisión tiene lugar por vía inhalatoria. Sólo puede traspasarse al hombre mediante "un contacto reiterado y próximo con animales vivos enfermos", afirman los expertos. Hasta el momento no se ha constatado en ningún caso el contagio a través de la alimentación.Los epidemiólogos, coordinados por la Oficina Internacional de Epizootias (OIE), siguen buscando medidas para luchar contra esta enfermedad animal que se ha transmitido también con consecuencias mortales a un número indeterminado pero cada vez más importante de personas.Control de los riesgosPara hacer frente a una hipotética expansión incontrolada de la gripe del pollo se contemplan medidas como la activación de detectores de fiebre en los aeropuertos. En el supuesto caso de detección de una posible infección de un pasajero, se procedería a su hospitalización y al aislamiento de todo el avión y su pasaje en áreas reservadas de los aeropuertos. De momento, la OMS recomienda:
– Que las personas que viajen a zonas que estén sufriendo brotes de gripe aviaria eviten el contacto con mercados de animales vivos y granjas de aves.- Tener especial precaución con las heces de las aves infectadas, se sabe que contienen grandes cantidades de virus.- Los virus de la gripe se destruyen por el calor. Como medida preventiva, los consumidores deben asegurarse de que todos los alimentos derivados de las aves, incluidos los huevos, sean cocinados adecuadamente.En un intento de minimizar el riesgo para la salud pública de esta infección vírica en el hombre, el Ministerio de Sanidad y Consumo de España además ha recomendado a aquellas personas que puedan llegar a tener contacto con poblaciones de aves infectadas:- Vacunarse contra la gripe común, ya que la vacunación frente a virus de la gripe puede reducir la probabilidad de coinfección entre los seres humanos y la posibilidad de que una enfermedad enmascare a la otra.- Profilaxis con medicamentos antivirales.- Protección de los trabajadores implicados en la eliminación de desechos y excretas de aves de corral con ropas y equipos apropiados.