Si las famosas lo son, por qué no intentarlo.
Hemos visto a celebridades como Kim Kardashian y Adele que lucen hermosas siendo gorditas, sin embargo, muchos estudios creen que las personas gorditas pueden tener problemas emocionales. ¿Puedo ser una gordita feliz?
Un estudio presentado por el Congreso Nacional de Psiquiatría reveló una gran cantidad de problemas psicológicos relacionados con la obesidad. La investigación dice que el 31% de las personas con sobrepeso investigadas habían sufrido un trastorno de ansiedad; que el 35% tenía antecedentes de depresión; el 17% anorexia y bulimia; el 10% un trastorno en el control de los impulsos; y el 20.4% déficit de atención e hiperactividad.
Otro punto de vista fue el de investigadores de la Universidad McMaster de Estados Unidos, que demostraron que el gen FTO (uno de los principales responsables genéticos de la obesidad) se asocia a una reducción del riesgo de depresión. En otras palabras, además de un gen de la obesidad podría considerarse un “gen de la felicidad”, tal y como concluyen los autores del estudio en la revista Molecular Psychiatry.
En conclusión la felicidad, tanto de gorditas como flacas, depende de las características de las personas. Como por ejemplo: Autoestima, sus logros, lo que es capaz de crear y sostener.