Algunos alimentos pueden causar alergias en ciertas personas. Son reacciones que ocurren por una sensibilidad del organismo excesiva ante determinadas proteínas de los alimentos, siendo éstas una parte esencial de la nutrición humana. Esta reacción se repite cada vez que comemos el alimento en cuestión. Los niños son mucho más propensos a padecerlas debido a que su sistema inmunológico todavía no está completamente desarrollado, por eso se va introduciendo la alimentación poco a poco, hasta que el alimento sea fácilmente asimilado.Así, cuando exista la sospecha de que se padece una reacción alérgica a un determinado alimento, en primer lugar es necesario dejar de comer el alimento susceptible de provocarla. No se debe asumir que una persona o un niño sufren una alergia a un alimento hasta que sea confirmado por un médico.Sólo se obtendrá un diagnóstico fiable de la alergia alimentaria si se realizan las correspondientes pruebas por su alergólogo. En el caso de que aparezca una reacción alérgica a algún alimento hay que actuar según la gravedad de los síntomas. El tratamiento puede precisar desde tratamiento tópico para aliviar el picor hasta tener que acudir a un servicio de urgencias para recibir un tratamiento más específico. El único tratamiento para la alergia alimentaria es evitar el alimento.