Una alergia es una respuesta exagerada del organismo cuando entra en contacto con determinadas sustancias provenientes del exterior: antígenos y sustancias capaces de provocar una reacción alérgica y se conocen como sustancias alergénicas o alérgenos.
En casi todo el país la mayor las alergias son consecuencia de ácaros, polen de fresno, pasto y cucarachas caseras, mientras que en el norte de México es principalmente el polen del mezquite y del álamo.
El tratamiento de determinadas enfermedades alérgicas, como rinoconjuntivitis, asma bronquial y reacciones graves por picaduras de abejas y avispas, se basa en la educación del paciente y su entorno.
Es importante saber qué tipo de medicamento es el apropiado para cada situación, además de tomar medidas para impedir el contacto del sistema inmunitario del paciente con el agente causal o alérgeno, como las vacunas para la alergia o inmunoterapia
Con la vacuna antialérgica se desarrolla una tolerancia a los alérgenos administrados, lo que se traduce en una disminución o desaparición de los síntomas que el paciente padece cuando se enfrenta a ellos de manera natural.
La mejoría progresiva de los síntomas de la enfermedad (estornudos, lagrimeo, silbidos en el pecho o asfixia) conlleva una menor necesidad de los medicamentos indicados para su alivio o control (antihistamínicos, colirios, broncodilatadores, etc.).
Pacientes con rinitis y rino-conjuntivitis alérgicas provocadas por gatos, pólenes de pastos, malezas, árboles y cucarachas, ha demostrado disminución de síntomas nasales, uso de antihistamínicos y mejoría en la calidad de vida.
Se ha visto esa mejoría en niños de seis a 14 años con asma persistente leve y en adultos con asma persistente moderada, así como reacciones sistémicas por alergia al veneno de abejas y avispas, asociadas a síntomas cardiovasculares y respiratorios.
Se sugiere en niños asmáticos de dos a seis años en quienes reduce nuevas sensibilizaciones; pacientes con rinitis alérgica y dermatitis atópica sensibles a ácaros
Si alguien en tu familia ha sido diagnosticado con una enfermedad alérgica, ¿por qué no recurrir a la inmunoterapia?