Hoy en día el uso de audífonos o auriculares se ha vuelto parte importante en nuestra vida, ya que en todo momento queremos estar haciendo uso de ellos, pero ¿has pensado el daño que puede causar el uso excesivo de estos aparatos?
Si bien su uso frecuente no solo puede causar severos problemas de estrés, ansiedad u otras alteraciones nerviosas, además puede llegar a afectar tu capacidad auditiva de manera irreversible. Un daño al nervio del oído no tiene ningún tipo de cura.
Los audífonos pueden llegar a alcanzar una potencia de 100 decibeles, una cifra mucho más elevada de lo sugerido, que es entre 60 y 65 decibeles.
Los resultados de diversos estudios han arrojado que los diferentes ruidos que llegan a un nivel de decibeles mayor a las 120 pueden generar daños que difícilmente son curables. Esto no significa que sea pérdida total de la audición, solamente que el tratamiento puede llevar cierto tiempo y no siempre es con un resultado favorable.
La mayor parte del día estamos en contacto con diversos sonidos tanto al interior de un espacio como al aire libre. Estos sonidos aún son tolerados por nuestro aparato auditivo, pero cuando hablamos del uso de audífonos por un tiempo prolongado, además con un alto volumen, se está más expuesto a sufrir daños en el oído ya que el sonido llega directamente. Lo recomendable es escuchar música sin audífonos o bien a un volumen moderado y en tiempos menores de 1 hora.
La pérdida de la audición puede irse generando a través de los años. No se trata de una enfermedad y por lo tanto no tiene síntomas, por lo que es fundamental que estés al pendiente de cuánto tiempo estás expuesto a sonidos muy altos o el tiempo que pasas usando audífonos.
Cuida tu salud.