Para muchos es un fastidio y algunos otros ni siquiera sabía, pero es muy importante bañarse antes de meternos a una alberca.
En muchas albercas públicas es obligatorio meterse a duchar antes de usarlas, ¿pero sabes cuál es el motivo?
No solo una cuestión de higiene para los demás usuarios de la piscina, sino una medida muy importante de seguridad para mantener la salud del agua.
Así como lo lees. El agua de las albercas también necesitan de cuidados especiales. La mayoría se tratan con cloro y otros químicos para matar las bacteria que se pudieran acumular en estas grandes “estanques” y así evitar el contagio de enfermedades infecciosas.
Los productos que nosotros nos aplicamos en el cuerpo pueden interferir con la salubridad de la mezcla cloro, ya que pueden arrojar una derivado dañino llamado cloramina.
Cuando una persona no se baña antes de usar una alberca le agrega a la mezcla: restos de heces, sudor, cremas, shampoos, lociones, acondicionadores, entre muchos otras.
La cantidad de químicos que se acumulan en la piscina son demasiados y algunos reaccionan negativamente a otras composiciones.
Los más afectados por este problema, son a los que les encanta este tipo de atracciones, los niños, pues están más expuestos a los químicos nocivos que por sus juegos o por su dificultad de nadar están más propensos a tragar.
Aunque no hay ninguna evidencia concreta de que la exposición a estos químicos puede causar problemas sumamente graves de salud si hay pruebas de que pueden a llegar a afectar más a unos que a otros.
Pero por si las dudas, mejor toma tus precauciones y tú comienza haciendo la diferencia. Báñate antes de entrar siempre a una alberca y asegurate de que tus hijos, tu familia y tus amigos también lo hagan. Si crees que es necesario, pasa la voz.