Hoy en día la cesárea se ha convertido en una práctica muy usual, anteriormente se practicaba únicamente para resolver alguna complicación en el parto normal y con esto proteger al bebé.
La cesárea se realiza mediante una operación, haciendo una incisión en el abdomen, traspasando casi seis capas de piel, se abre el útero se extrae el líquido amniótico y finalmente al nuevo bebé.
México es uno de los países del continente americano en donde se practican más partos por cesárea, únicamente Brasil lo supera.
Se realizó una investigación a aproximadamente seis mil madres primerizas en el 2014, los resultados de esta investigación revelaron que casi el 50% de estos nacimientos fueron partos por cesárea. Otro punto relevante fue que las mujeres que están inscritas al seguro popular fueron las que tuvieron menos partos por cesárea que las que no cuentan con seguro de salud o están inscritas a otros programas del seguro.
Llama mucho la atención que en los hospitales privados se realizan más partos por cesárea, casi el doble que en los hospitales públicos.
Es necesario crear conciencia a las mujeres sobre los beneficios del parto natural.
Es importante que las mujeres estén conscientes de las ventajas y desventajas de cada uno de los procesos. Y de esta manera se tomen su tiempo para elegir cómo quieren que sea el nacimiento de su hijo.
Aunque en caso de que la decisión sea parto natural, deben estar conscientes de que si se presenta una complicación que ponga en peligro su salud o la del bebé, el embarazo podrá terminar en cesárea.
El parto es un proceso natural y maravilloso, el problema es que muchas mujeres optan por la cesárea por miedo a sentir dolor o que se les dañe la vagina. La mayoría de las mujeres que optan por tener a su bebé por cesárea, lo hacen por su propio gusto y no por indicaciones del especialista.