Uno de cada cuatro españoles duerme peor que el año pasado y de ellos, uno de cada cinco lo achaca a los problemas laborales y el miedo al paro, según una reciente encuesta del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO) presentada por la vicepresidenta de INFITO, Teresa Ortega.Según esta investigación, la crisis está afectando el sueño de los españoles, pues sus efectos superan, por primera vez, a las preocupaciones relacionadas con la familia y la salud.Un 30 por ciento de la población tiene al menos alguna de las manifestaciones propias del insomnio, aunque el insomnio crónico afecta sólo al 10 por ciento de la población, según la última Guía de Práctica Clínica del Insomnio en Atención Primaria. El insomnio crónico aumenta el riesgo de padecer hipertensión, diabetes y depresión, entre otras patologías.Para el doctor Antonio Vela, profesor de Psiquiatría de la Universidad Autónoma de Madrid y responsable del Laboratorio del Sueño Humano, "cualquier situación de crisis social causa mayor estrés a grandes grupos de población y no es aventurado decir que al menos el insomnio transitorio ha podido aumentar"."Hay una tendencia a sufrir insomnio si los padres también suelen padecerlo. Creemos que podría haber una predisposición genética", ha señalado el doctor Vela, para quien el "perfil" del insomne es el de una persona con "alta emocionalidad", es decir, que se alarma con facilidad ante el estrés.