Uno de los grandes beneficios de hacer un poco de ejercicio cada día.
Para todas las personas que hacen ejercicio, deben saber que la actividad física puede disminuir el riesgo de cálculos renales. Según una investigación de la Universidad de Washington, en Estados Unidos, esta es una razón más por la que se debe hacer ejercicio.
El estudio fue presentado en la Asociación Urológica Americana, donde se detalla que realizar cualquier tipo de actividad que requiera movimiento serviría para disminuir el proceso de calcificación, causante de la formación de cálculos renales.
El riesgo de calcificación aumenta en mujeres después de la menopausia, debido a los suplementos de calcio que les son prescritos. La obesidad es otro factor que incrementa el riesgo.
La actividad física, explica el autor principal del estudio, modifica el modo en que el organismo maneja los nutrientes y líquidos que afectan la formación de las piedras.
Las personas que se ejercitan transpiran sal y retienen el calcio en los huesos, en vez de que este se vaya directamente a los riñones, donde se forman las piedras. Los deportistas beben mucha agua, lo que también sirve para evitar los cálculos.
Luego del estudio aplicado a más de 85 mil mujeres mayores de 50 años, los investigadores llegaron a la conclusión que la intensidad del ejercicio no tenía importancia, sino la cantidad por semana; por lo que caminar más de dos horas a la semana reduciría el riesgo de cálculos renales hasta en una tercera parte.