Conforme vamos creciendo hay ciertas partes del cuerpo que se debilitan, por eso debes saber qué ejercicio es conveniente para ti según la edad que tengas.
Cuando tienes 20 años: Tu meta es tonificar los músculos, ya que a esa edad se tiene mucha fuerza y energía que pueden ayudar a adelgazar y tonificar rápidamente. Haz ejercicios aeróbicos, abdominales y pesas.
Cuando tienes 30 años: Es posible que cuando cumplas esta edad, perder esos kilitos de más sea más difícil de eliminar. Sin embargo, Brooke Siler, autora del libro “El cuerpo del Pilates”, señaló que hábitos como preferir estar parada que sentada, tomar escaleras en lugar de elevadores o dejar el auto y caminar, pueden ayudarte a bajar de peso. Los circuitos que combinan resistencia con ejercicios aeróbicos son una opción conveniente, pero no hay que dejar de lado el trabajo de fuerza. Inclúyelos en tu programa de ejercicios dos a tres veces por semana.
Cuando tienes 40 años: A esta edad muchas mujeres son testigos de una transformación en su figura. Entre la gravedad, las hormonas y el metabolismo cada vez más lento, es casi inevitable notar que se gana grasa con facilidad. Hay que incrementar el trabajo de cardio en duración y frecuencia, pero aligerarlo en intensidad. A esta edad comienza a salir un bulto justo debajo del sostén, por eso es recomendable que hagas ejercicios especializados en esta zona.
Cuando tienes 50 años: A esta edad es vital que hagas cardio moderado con duración media, así como sesiones de pesas ligeras. Los estiramientos toman gran importancia, pues contribuyen a mantener la flexibilidad, especialmente al llegar a esta edad; el yoga y el Taichi son buenas opciones.
Cuando tienes 60 años: Notarás que tus huesos están más débiles, sin embargo, esto no debe ser pretexto para dejar de hacer ejercicio. Adapta la rutina a ejercicios que tengan poco impacto en las articulaciones, como la natación, gimnasia acuática y caminata.
¡La edad no impide que hagas ejercicios!