Importancia de la calidad del aire para la salud

La especialista Ruth de Celis Carrillo destacó que una adecuada higiene ambiental y ventilación constante promueven una mejor calidad del aire que se respira en el hogar, lugar en donde pueden captarse diversos elementos tóxicos que dañan la salud.

La investigadora adscrita a la División de Inmunología del Centro de Investigación Biomédica de Occidente (CIBO) del IMSS en Jalisco dijo que la calidad del aire no solo afecta las vías respiratorias, sino además puede repercutir de forma impactante en la calidad del sueño.

“La calidad del aire no solo impacta vías respiratorias, sino también puedes tener problemas en tu calidad del sueño si vives en un área donde el aire está contaminado, porque cuando descansas necesitas estar bien oxigenado, y si no tienes un sueño adecuado eres candidato a enfermarte de muchas cosas”, advirtió.

Indicó que una mala calidad del sueño aumenta proclividad a desarrollo de enfermedades, sobre todo asociadas con el dolor, como el cáncer, sin omitir que la falta de sueño conduce al estrés y este a una mala digestión y absorción de nutrientes en el organismo entre otras afectaciones.

Señaló que una calidad deficiente del aire ocasiona debilitamiento del sistema inmunológico, por lo tanto, de presentarse células tumorales, el organismo es incapaz de combatirlas y da como resultado la presencia de un cáncer invasivo.

Explicó que el ventilar la mayor parte del día la vivienda contribuye a una adecuada circulación del aire y combate la concentración de bióxido de carbono.

“Aunque los habitantes del hogar no sean fumadores activos, pueden portar hidrocarburos que adquirieron de forma externa al convivir en otros ambientes y con otras personas que consumen tabaco”, apuntó.

Precisó que en el hogar puede haber otro tipo de concentraciones tóxicas como sustancias que se liberan al momento de preparar alimentos debido a utilización de utensilios de ciertos materiales no ecológicos.

“Cuando cocinas liberas al ambiente vapores tóxicos que contienen metales pesados, lo más recomendable es utilizar el acero inoxidable porque es el que menos perjudicial resulta para el ambiente, de los materiales más tóxicos está el barro, seguido por el aluminio, el peltre o incluso el hierro fundido”, afirmó.